Hoy en día todos usamos el plástico de burbujas para principalmente una cosa: envolver objetos. Aunque algunos disfrutan reventándolos o incluso disfrazándose con él. Sin embargo, en sus inicios este curioso material fue pensado con otra función muy distinta. El plástico de burbujas pretendía ser un papel tapiz para los hogares. Alfred Fielding y Marc Chavannes fueron los inventores; ellos querían innovar en la decoración de las casas, pero su experimento salió mal y terminaron dándose cuenta que los pliegues con aire dentro podrían ser algo genial para embalar productos.
Fielding y Chavannes hicieron su experimento uniendo y presionando dos cortinas de baño para crear el papel con textura. Querían que el papel tapiz fuera de plástico pero con soporte de papel. Sin embargo la máquina llenó de aire el plástico y quedaron las burbujas tal como las conocemos
“Los inventores no admitieron la derrota. Encontraron una manera de convertir su creación en un segmento completamente nuevo de la industria: los materiales de envasado que cubren, amortiguan y protegen”.
-Vocera de Sealed Air–
Un tipo llamado Joey Green escribió el libro “The Bubble Wrap Book”, en donde se cuentan miles de detalles sobre el plástico de burbujas. Seguro que quienes disfruten de las curiosidades querrán comprar uno…
¿Qué te pareció? ¿Te imaginabas que fue pensado originalmente para algo así?
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